Thursday, April 18, 2013

Pagadios - Alsdie, en el país de las cosquillas.


Cuando eramos niños, creíamos en la verdad de los padres, pero mas en sus relatos. Los cuentos eran los lugares donde solo se admitía lo que se soñaba después de escuchar a papa o a mama leerlos metódicamente. Quizás ese era el empujón a nuestras conciencias divinas, ansiosas de descubrir los miles de mundos superiores e inferiores de los Dioses, con las intenciones de ser un poco inmortales en el Olimpo de tierra. Jamas abandonamos las fantasías, crecemos con ellas y lo literario nos enseña que hay lugares donde solo se puede llegar viajando...Alicia es la niña por la cual muchos nos preguntamos; ¿porque caí en una madriguera de conejo interminable y el Sombrerero tenia los ojos dados vueltas, o sobre las pócimas para ser pequeña?. ¿Es posible reconocer otros mundos a través de viajes con hongos? Si aceptado. ¿O vacíos a lo mas profundo de nuestras experiencias psicodelicas? ¿Porque la mente cuando descansa alucina, y despiertos, solo a través de drogas logramos igualar esas sensaciones despiertos? El porque, como siempre esta en los libros, en las hojas lisas que muelen genoma a través de letras. Por siempre el hombre necesito de la magia para poder llevar adelante la aberrante realidad. Se tomo recreos para escapar de sus horribles día a día. Lewis Carroll escribió Alicia en el país de las maravillas en un estado tan puro que sus flashes eran utopias de niños. Esas que de cuando en cuando se transforman en pesadillas...