Wednesday, June 26, 2013

Diego Vidal, una forma de ser escritor - PAGA DIOS 126

En las penumbras de esas casas viejas, de una antigua ciudad, que hoy es sobrevolada por naves gigantes, donde el agua es la razón de la vida y el porque de tantas muertes, sentado en una derruida mansión se encuentra Vidal Diego, Escritor. Quieto lejos de la chimenea donde crepitan los últimos pisos de lapacho de la otrora mansión de los Vidal, esta el. Casi como un ser del edén perdido, de un sátiro soplando palabras, moviendo solo el seño y la flauta para articular las estructuras de su inmortalidad. La Pandilla de Ratas cae a este lugar donde en la entrada se pueden ver colgados secos y frescos cadáveres de ficción machacadas una y otra ves hasta hacerlas polvo. La sustancia queda tendida en el aire, formando soldados, guerreros que crea Diego Vidal en sus prósperos escritos. Les recomendamos que se ajusten los cinturones, el que crea pida a Dios por la vuelta, que será la distancia misma entre lo que era y lo que es después de escuchar a el Escritor. Con un trago en la mano y varias bolas de luces alrededor, Diego Vidal abre la puerta de la percepción, dejando en claro, que el mote de escritor jamás fue tan importante como su nombre aferrado a su novela, su casa, su forma de vivir. “Desde el Infierno”, los invitamos a descender a esta vieja casa del inframundo, nada será igual una vez que sus palabras lleguen a tu cerebro….